La digitalización de la industria de medios de comunicación y entretenimiento ha transformado la mayoría de los aspectos de su cadena de suministro global, desde la creación y adquisición de contenido, hasta el procesamiento, edición y distribución global. Además de modificar drásticamente las limitaciones de distancia, tiempo y costos de transacción, la cadena de suministro digitalizada brinda la oportunidad de aumentar la eficiencia fiscal. Sin embargo, esta eficiencia fiscal no se obtiene automáticamente; se requiere una planificación proactiva.
Planificación para la Eficiencia Fiscal Global
Por lo general, los individuos o entidades comerciales que crean contenido, mantienen su residencia física y fiscal en un solo país. En muchos casos, este país de residencia no es el ideal para maximizar la eficiencia fiscal global relacionada con el contenido producido.
Tomemos el ejemplo de una empresa de medios de comunicación y entretenimiento estadounidense (corporación o intermediaria –passthrough-) que produce contenido para su distribución internacional. Supongamos que crea cierto contenido en los EE. UU. y otro contenido lo crea bajo contrato con personas o entidades en países fuera de los EE. UU.
Escenario I: Impuestos Cuando el Contenido es Propiedad en los EE.UU.
Fuente de Ingresos en los EE.UU.
Los ingresos generados por la corporación estadounidense a partir de la explotación del contenido en el mercado estadounidense se gravan a la tasa corporativa del 21%. Una vez distribuido, los accionistas tributan nuevamente a una tasa del 23.8%. Si el contenido se explota a través de una entidad intermediaria en EE.UU. (p.ej., LLC o asociación estadounidense), los propietarios individuales pagarían impuestos sobre dichos ingresos a sus tasas graduales normales (máximo del 37%).
Fuente de Ingresos Extranjera
Los ingresos generados de una empresa estadounidense por la explotación de contenido fuera de los EE.UU. se denominan “Ingresos por Intangibles Derivados del Extranjero” (por sus siglas en inglés “FDII”) y actualmente se benefician de una tasa de exportación preferencial en EE.UU. del 13.125%. Una vez distribuidos a los accionistas individuales, dichos ingresos gravarían nuevamente a una tasa del 23.8%.
En comparación, el contenido explotado fuera de los EE.UU. a través de una entidad intermediaria estadounidense, da como resultado que los propietarios individuales paguen impuestos bajo sus tasas graduales normales (máximo del 37%). Mientras que estas tarifas en EE.UU. pueden parecer favorables para ciertas empresas e individuos, al compararlas con sus opciones disponibles al ser propietarios del contenido fuera de los EE.UU., en la mayoría de los casos, una planificación cuidadosa sobre la propiedad extranjera del contenido da como resultado la máxima eficiencia fiscal global.
Si el Congreso de EE.UU. aprueba las medidas fiscales que se describen a continuación, las ventajas de la propiedad extranjera serían aún mayores.
Aumento Propuesto en las Tasas Fiscales de los EE. UU.
Las últimas iniciativas de reforma del Congreso de los EE.UU. exigen aumentar las tasas fiscales corporativas del 21% al 26.5% y la tasa del impuesto sobre la renta del 20% al 25%. Además, dicho Congreso ha presentado iniciativas que aumentarían la tasa preferencial de exportación de FDII del 13.125% al 20.7%. Finalmente, el Congreso estadounidense propone aumentar el impuesto sobre dividendos del 23.8% al 28.8%.
Escenario II: Impuestos Cuando el Contenido es de Propiedad Extranjera
Como alternativa a la propiedad del contenido en EE.UU., supongamos que el negocio de medios de comunicación o entretenimiento estadounidense (nuevamente una corporación o entidad intermediaria) establece una subsidiaria corporativa extranjera ( “FORCO”) en una jurisdicción de baja imposición fiscal, con el fin de contratar creadores de contenido en EE.UU. y en el extranjero. La empresa estadounidense aún puede estar a cargo de identificar a los creadores de contenido, el marketing y la distribución en los EE.UU.; pero el uso de una empresa extranjera garantiza que el contenido se financie y sea propiedad fuera de los EE.UU., y que las licencias y los ingresos por ventas se generen y se graven principalmente fuera de los EE. UU. Las consideraciones fiscales relevantes de la aplicación de una planeación fiscal de este tipo son las siguientes:
Tributación Local del País de Origen de la FORCO
Siempre que la FORCO financie y contrate directamente a productores de contenido extranjeros, debe ser considerada la propietaria del contenido con todos los derechos de explotación. Suponiendo que la FORCO se encuentre en una jurisdicción de baja imposición fiscal con una buena red de convenios fiscales, debería poder generar ingresos globales por arrendamiento y ventas de una manera muy eficiente, desde el punto de vista fiscal, con una retención de impuestos mínima. Además, la FORCO debería poder beneficiarse de un tipo impositivo de entre el 0% y el 15% en su país de origen.
Impuestos de la FORCO en los EE. UU.
Debido a los cambios en la legislación fiscal de los EE.UU., posteriores a la Tax Cuts and Jobs Act (Ley para la Reducción de Impuestos y Generación de Empleo) de 2017 (por sus siglas en inglés “TCJA”), los ingresos operativos obtenidos por la FORCO se incluirán en los ingresos imponibles de los accionistas en EE.UU. como un dividendo “ficto” (es decir, estimado), ya sea que la FORCO realice o no una distribución en efectivo. Sin embargo, el impuesto estadounidense sobre este dividendo ficto será del 0% cuando el impuesto corporativo pagado en el país extranjero sea de al menos el 13.2%. Alternativamente, el impuesto estadounidense será de un máximo del 10.5% si la FORCO se encuentra exenta del impuesto corporativo en su país de residencia.
Con una planificación adecuada, las ganancias extranjeras se pueden distribuir a un accionista estadounidense sin incurrir en ningún impuesto adicional. Además, dado que los impuestos finales a los accionistas pueden diferirse hasta que los accionistas realmente reciban un dividendo, la estrategia de crear y explotar contenido fuera de los EE.UU. ofrece la oportunidad de lograr una mayor eficiencia fiscal.
Conclusión
La cadena de suministro digitalizada de la industria de medios de comunicación y entretenimiento, ofrece oportunidades sustanciales para una planificación eficiente desde el punto de vista fiscal. Además de reducir la tasa impositiva efectiva global, una estructura impositiva internacional bien planificada debería permitir a los accionistas finales diferir los impuestos estadounidenses, permitiendo que una mayor parte de las utilidades de la empresa después de impuestos, se reinviertan en la cadena de suministro y en la creación de nuevo contenido.